La habitación que nos dieron tenía una zona de estar y un hervidor eléctrico. Las vistas al jardín eran fabulosas y la ubicación era tranquila y también ideal, en las proximidades de las montañas, también de un parque. Nos ha gustado mucho el tiempo que pasamos allí, era justo lo que teníamos en mente.

Pasamos un tiempo excelente aquí, recomendaría este lugar a cualquiera. Habitaciones lo suficientemente espaciosas, con buenas camas, WiFi gratis.

Nos encantó la experiencia de hospedarnos en un auténtico castillo. El edificio y su jardín son realmente de cuento. Las habitaciones eran enormes y limpias, con camas muy confortables. El desayuno, en el comedor del castillo, era delicioso y nos transportaba a otra época con su mobiliario antiguo. El personal fue muy amable y servicial, brindándonos información y recomendaciones útiles para nuestra estancia. La ubicación, frente al castillo, fue perfecta y nos permitió disfrutar de la belleza de este lugar.

Que no pude quedarme más tiempo.

El personal y el anfitrión fueron todos encantadores. Habitaciones con buenas camas. Desayuné en el comedor y todo fue buenísimo...

Había habitaciones muy bien decoradas y lo suficientemente espaciosas con tanto una ducha grande como un baño en suite. Los desayunos aquí eran deliciosos, con un café muy rico.

Mi habitación incluía una zona de estar y un hervidor eléctrico. La vista al jardín desde la ventana era fabulosa.

Podemos recomendar este hotel a todos, pasamos aquí 2 noches buenas. El hotel era familiar y el lugar nos pareció tranquilo. Las habitaciones eran bellamente decoradas, con buenas camas. El personal era encantador, nos han gustado mogollón esos tipos. El desayuno era delicioso, con un café muy rico.

Me alojé en un castillo de ensueño durante mi última visita a La Bastide-de-Serou. Fue una experiencia única y encantadora. El edificio y el jardín del castillo son simplemente mágicos, te transportan a otra época. Las habitaciones son enormes y muy bien cuidadas, llenas de encanto. El propietario, que habla español, es extremadamente agradable y siempre está dispuesto a tener una buena conversación. El desayuno, servido en el hermoso comedor con muebles antiguos, es completo y de alta calidad.

100% recomendable!

habitaciones con buenas camas. tener una ducha, un secador de pelo y albornoces suaves en el baño ha sido un lujazo. su ubicación era ideal, junto al lago. además, estaba muy, pero que muy cerca de los jardines y del castillo y también del río.

Cumplió mis deseos en todos los sentidos, recomiendo este hotel, es total. El hotel se encontraba cerca de un castillo, de los jardines y también de las montañas. Nos dieron una habitación familiar, era práctica, con un buen diseño con tanto buenas camas como una ducha grande.

Habitaciones amplias y limpias, baños espaciosos, desayuno delicioso con productos orgánicos y caseros, anfitriones amables y serviciales, hermoso terreno con jardines y estanque. Agradable paseo al pueblo junto al río. Una experiencia única en un castillo del siglo XVIII.

Las habitaciones eran muy bien decoradas y prácticas, con un buen diseño, con buenas camas, todo era bonito. El hotel tenía una ubicación estupenda, junto al lago. Lo que es más, estaba muy cerca del río, también de del parque.

El hotel tiene un encanto único, alojarse en un auténtico castillo del siglo XVIII es una experiencia increíble. Las habitaciones son enormes, con muebles antiguos y muy cómodas. Además, el desayuno servido en el comedor del castillo es delicioso, con productos de calidad y un ambiente de película.

Todo estuvo perfecto. ¡!

La habitación era muy bien decorada y práctica, con un buen diseño, tenía batas, toallas de baño y toallas. La cama era súper cómoda, nos ha gustado mogollón todo. El hotel tenía una ubicación tranquila y también ideal, junto al río. Lo que es más, estaba a pocos pasos de los jardines y también del lago.

El entorno del castillo es realmente hermoso, con grandes extensiones de terreno y un precioso lago. Además, se puede aparcar cerca de la puerta, lo cual es muy conveniente. En el interior, las habitaciones son amplias y luminosas, con ventanas que ofrecen vistas a jardines bien cuidados. Los baños también son espaciosos, con ventanas que dan al parque. Los propietarios son amables y acogedores, y el desayuno se sirve en un comedor encantador, evocando el ambiente de un castillo. Además, se pueden disfrutar de paseos por el parque y de la cercanía del pintoresco pueblo para comer en sus restaurantes.

No se menciona ninguna crítica específica de otros aspectos del hotel en las reseñas proporcionadas.